VII Torneo Duplicado de Cerdanyola

A veces, el mundo del Scrabble es extraño. Para aquellos que no conocemos Cerdanyola del Vallès, quedamos sorprendidos de encontrar un bar-restaurante tan histórico que contiene el club de ajedrez de la ciudad y que cede su espacio al Club de Scrabble de Cerdanyola. Así fue en esta ocasión, en su séptimo Torneo Duplicado de Scrabble en Español.

La primera partida empezó tarde. Tampoco había prisa. Se preparaban las fichas, se hablaba, salían al patio a fumar… Finalmente, llegó el ordenador (junto a su amo, se entiende) y Joana Rubio, jueza principal, pudo empezar a preparar el DupMaster. La cosa se ponía seria.

El punto de novedad llegó de l’Hospitalet. Sayaka como jugadora (con premio de debutante incluido) y Cristina, como ayudante de la jueza.

La primera partida costó. Jugar una duplicada es duro, y más si hace tiempo que no practicas… La segunda ya fue más fluida, con ganas de terminar y gozar de un merecido almuerzo. Aparecieron palabras para la historia como GÁLBANO, FRAILEÑO, CIBELEA o JALECO (que no admite plural por ser una palabra en desuso, detalle que costó puntos a muchos jugadores).

Las partidas duplicadas, con su concentración y jugadas al límite del tiempo impuesto (unos mezquinos tres minutos), no son tan amadas entre los jugadores habituales como las partidas clásicas, donde compites contra un igual con el que puedes ir conversando mientras controlas tu tiempo de juego, pero no dejan de ser divertidas y emocionantes.

Imagina el triunfo que es ser el único que ha visto la jugada maestra. La satisfacción de lograr una buena puntuación cuando un simple error en las coordenadas te puede hacer caer en el infierno del 0. La emoción está asegurada.